No existen palabras o frases nuevas que no se hayan ya dicho. Mi propia historia refleja lo que fue y lo que és hoy un "Gran Pedazo de Nuestra Identidad como Ciudad ". Parte de mi niñez y adolescencia la viví en una vivienda destinada a Jefe de Estación destinada a la operación del trafico de trenes que circulaban desde La Cordillera a la Ciudad de Buenos Aires. Nunca olvidaré los perfumes de la fruta, los olores del vino y el ganado en pie que más de treinta trenes diarios de carga con 200 ejes o 50 vagones trasponían la Estación de un pequeño Pueblo, ya desaparecido como muchos otros. No podré olvidar cuando mi padre hacía demorar un minuto más, con la benevolencia del Guarda que despachaba la salida del Tren de Pasajeros, hasta que el mozo del Vagón Comedor me alcanzará la Revista que yo había elegido comprar. En estos Pueblos unidos por el Ferrocarril, único medio de comunicación, tambien ayudo a mi formación con lectura de revistas deportivas, historietas y aventuras de mi preferencia.
La aventura de viajar en Coches dormitorios. Esperar con ansiedad cuando el mozo recorría el tren completo de pasajeros, exponiendo sabrosos comestibles y bebidas. El drama que generaba la ocurrencia de un descarrilamiento, con secuelas materialmente importantes. Los viajes a la Ciudad en la "zorra" de los "catangos" o en la locomotora de un tren que gentilmente el conductor accedía a transportarme.
El crecimiento y los caminos de la vida, con el titulo profesional en mi mano me devolvieron a la actividad ferroviaria en uno de los Talleres de Fabricación y Reparación más importantes de Latinoamerica. Luego me muchos vaivenes, marchas y contramarchas con desiciones políticas de facto y tambien republicanas, devino en su cierre definitivo. Reflejado en las imagenes mostradas en este Blog, es dificil digerir tanto despojo, tanta crueldad maliciosa puesta al servicio de la desrucción ferroviara. Lamentablemente con la complicidad de útiles idiotas, que en merito a "los buenos oficios" aún permanecen apropiados de bienes que no le son propios, algunos. Otros compensados con activos o funciones de "empresarios" y los que más ocupando cargos públicos de reanudación permanentes, adheridos o enquistados en el mismo Partido Político que ejecutó la "masacre del medio ferroviario" más importante de Latinoamerica. Recuerdo con fiel claridad la "mentira impuesta como método", transmitida con desparpajo y sin reparos, en asambleas locales el destino de estos Talleres: será un taller modelo, los ferrocarriles no serán privatizados sino consecionados y otras frases mentirosas, que eufemisticamente tendían a igual resultado. Su destrucción.
